El grupo nació en los programas de educación musical de la Orquesta Joven del Ecuador. Dará un concierto a mediados de diciembre del 2020 en Guayaquil y Cuenca. Sacha Runa está conformado por los violinistas Kassandra Vielma (23 años) y Juan Lincango (20 años), la violista Estefanía Quevedo (26) y el violonchelista Alejandro Dávila (24 años).
“Ya habíamos tocado antes, pero este concurso nos unió más”, cuenta Lincango. El evento se realizó del 2 al 4 de noviembre en el Teatro Beethoven, del Colegio Alemán, con el apoyo de la Embajada de Alemania en Ecuador y la Red Cultural Alemana.
El concurso fue parte de los festejos internacionales por los 250 años de natalicio del músico alemán Ludwig van Beethoven. Se inscribieron siete grupos de música de cámara, todos menores de 30 años. Los requisitos para la competición eran interpretar un cuarteto de Beethoven y una obra de libre elección. Sacha Runa eligió el cuarteto No. 6 Opus 18 y ‘La muerte del ángel’ del argentino Ástor Piazzolla.
“Queríamos participar en el concurso de la forma más profunda posible. Realmente la música de Beethoven es muy difícil y ‘La muerte del ángel’ también.
Por la pandemia era muy difícil movilizarse, entonces decidimos vivir en la misma casa, compartir las mismas cosas y ensayar la mayor cantidad de tiempo posible”, relata Lincango.
El Cuarteto Sacha Runa está integrado por jóvenes de entre 20 y 26 años. Foto: cortesía Antes del concurso, el cuarteto se presentó en albergues, casas de acogida y hospitales para consolidar su performance y motivar diferentes sentimientos.
“En la Orquesta Joven hay una visión de que para lanzarse a un desafío hay que superarse. Los chicos hicieron, durante dos semanas, una preparación psicológica, técnica y visualizaciones. Es un proceso interesante”, cuenta Diego Carneiro, director de la Orquesta Joven del Ecuador.
Para Carneiro, este concurso fue importante a nivel musical, porque no hay antecedentes de un evento como este en Ecuador.
Además, asegura, este tipo de iniciativas son estimulantes en un año que ha venido con muy pocas oportunidades y retos para los músicos. “Con la pandemia, algunos chicos dejaron de estudiar música por la incertidumbre, principalmente económica, pero usar la música para llevar mensajes positivos hace que sea vista como una herramienta primordial”, reflexiona Carneiro sobre el impacto del premio en otros jóvenes músicos. El jurado estuvo conformado por Carneiro, el violista Simón Gangotena, el pianista Andrés Torres y el director del concurso, Johannes Dering-Read.
En el segundo lugar quedó el Trío de piano Sadel y en el tercer puesto se posicionó el Trío de piano Quito. Como parte del premio, los ganadores realizarán conciertos en Cuenca y Guayaquil, el 16 y 17 de diciembre, respectivamente. Presentarán los repertorios con los que ganaron.
