Sin duda alguna, Pop-Up Teatro Café goza de audacia y hace la diferencia, pero tomando todas las precauciones necesarias. Muchos de ustedes no lo saben, pero el establecimiento artístico tiene cartelera y ya va por la segunda temporada con propuestas de microteatro con el estándar de calidad de siempre.
No les estoy convocando masivamente, tengamos claro como amantes del teatro que debemos asumir los cuidados pertinentes para combatir el “coronavairus”. Lo que sí les diré es que en el Pop-Up se puede pasar un momento agradable sabiendo que es un lugar seguro. Así que no se inquiete si el aforo está completo… dese una vuelta o regrese al día siguiente.
En la temporada con que el teatro se aventuró, se presentó una obra que había sido estrenada para noviembre del 2019 y postergada sucesivamente. Por motivos que conocemos, se tuvo que dilatar mucho más su presentación.
Me refiero a Buenas vibras, en la que actúa Alicia La Tite Macías y dirige Bárbara Fernandes, quien también escribió el guion.
La obra era una comedia que atravesó varios temas sobre la sexualidad femenina, el feminismo y el amor propio. Es meritorio que luego de casi un año de preparación, al fin pudieron montar la obra y no es mala idea darle a ese montaje la oportunidad de volverse a presentar».
La pequeña sala de teatro tenía siete asistentes y todos estábamos con mascarillas, incluida la actriz. Una sensación extraña en realidad.
La obra era una comedia que atravesó varios temas sobre la sexualidad femenina, el feminismo y el amor propio.
Es meritorio que luego de casi un año de preparación, al fin pudieron montar la obra y no es mala idea darle a ese montaje la oportunidad de volverse a presentar.
Ahora en cartelera hay comedias y dramas. Por ejemplo: Familia rara es una obra dirigida por Ricardo Velástegui y un guion escrito por Jorge Sandoval… que parecía que se nos había desaparecido el señor, pero ahí está.
Esta obra de contenido muy interesante hace ver la potencialidad de Sandoval para escribir teatro. El trabajo es de carácter inteligente, fue como ver algo parecido a Friends: un sitcom que contaba con un personaje ficticio que aparece en escena… lo que hacía sostener nuestra atención.
Los personajes son una caricatura bien hechita. Actúan Joyce Macías y José Andrés Caballero. La obra se dio detrás de una lámina de acrílico que, obviamente, estaba entre los actores y el público».
Esta obra trató temas actuales como la pandemia y la “buena” paternidad. Y en efecto, la familia es toda rara. Un sitcom es una comedia de situación, también se le puede llamar “telecomedia” allí donde existen las risas grabadas, etc. Se llama así por su abreviación del inglés: situation comedy.
Los personajes son una caricatura bien hechita. Actúan Joyce Macías y José Andrés Caballero. La obra se dio detrás de una lámina de acrílico que, obviamente, estaba entre los actores y el público. Sin embargo, mientras se va dando la obra… nos vamos olvidando de la lámina. Es un trabajo que recomiendo mucho que vean.
En serio es de aplaudir a quienes no se sentaron en un mar de llanto por las condiciones a las que la pandemia nos obligó y más bien se dedicaron a producir teatro… o algo.
Las recomendaciones son que monten obras en donde tanto actores como espectadores no se toquen, tal como piezas de ajedrez en un tablero, con el fin de que puedan replicarse en más establecimientos.
El teatro es tierra fértil, pero no basta con tener buena semilla, se necesita ser buen agricultor.
Nos vemos en el Pop-Up. (O)