La Casa de la Cultura Ecuatoriana presenta una serie de exposiciones virtuales para que la ciudadanía pueda ingresar y acercarse a la sensibilidad de los artistas por nuestras Redes. Usted puede ser partícipe de la exposición titulada “Diarios de otros mundos”.
Zona Cultura de las radios de la CCE, entrevistó a Santiago Erazo; autor de esta exposición.
¿Quién es Santiago Erazo?
Soy artista visual y me dedico a la pintura imaginaria
Usted menciona que puede vivir del arte, que le ha salvado la vida y que le hace más resistente, ¿Cómo demostrar esto?
La prueba fehaciente es que estoy aquí. Fue un poco complicado porque no tenía mucho apoyo y apertura, cuando quería estudiar arte y empezaba desde la casa.
Es una necesidad de expresar, y dejé de expresarlo con las palabras, porque había mal entendidos. Me sumergí, empecé a descubrir otros mundos. Yo dentro de mi propio ser. Me mantengo curioso, motivado, con ganas de seguir adelante con este proyecto.
Galo Duque de la CCE me impulso para exponer estas obras. Gané una beca para ir a estudiar en Indonesia, el arte milenario del arte Batik, a mi regreso empecé a vincularme con algunos proyectos nacionales e internacionales, y ayudar niños vulnerables con arte-terapia. El arte me salvo la vida y me ayudó a trabajar con esos chicos.
¿Qué es el arte milenario y el batik?
El arte milenario y el batik es la primera técnica de teñido textil del mundo. Utiliza cera de abeja para resistir al teñido. Los colorantes son a base de agua, se hacen sobre una tela. Es la primera forma de las pinturas que tenemos en las cavernas, en los murales, se hacen en tela, es el concepto de la serigrafía, la acuarela y algunas otras técnicas de pintura.
El arte es difícil, desde casa, hay la prohibición con estas típicas preguntas: ¿De qué vas a vivir? ¿No puedes hacerte artista?
¿Qué respuesta les daría hoy?
A la gente que siente una pasión, la necesidad de comunicarse por medio del arte, ¡Qué sigan adelante! ¡Qué no todo es dinero!
Mire la situación que vivimos, con dinero y no hay en que gastarlo. Lo importante es confiar en uno mismo y hacer lo que uno siente. Esa necesidad de expresar mediante el arte nos lleva a un punto en el que ya no hay regreso, simplemente seguir adelante.
¿Cuál es el proceso que Santiago Erazo para poder plasmar las imágenes con líneas y colores diferentes?
El proceso es una introspección al mundo interior. No son imágenes sin sentido, en el fondo de todo esto hay un significado, a pesar de que este en el inconsciente la parte desconocida. Después podemos ver que las formas se ven reflejadas quizás en sueños, o en vivencias de muchas personas, no simplemente mías, sino que puedo conectarme con seres mitológicos que existieron en culturas antiguas: hindúes, Sumerias, cosas de esta naturaleza que son parte del estudio de mi maestría.
Estas formas no vienen de la nada, estamos conectados en el inconsciente y somos parte de un todo. Solo hay que despertarnos para interpretar estas imágenes que están escondidas.
¿Esta introspección cumplió con el desafío?
El desafío es de todos los días. De alguna forma, esta exposición cumplió con un de ellos: En mis inicios mi arte no era mostrarle a los demás. Son las hojas de mi diario que las contaba a mi de la manera más sincera.
Cuando tuve mi primer profesor en Indonesia me decía: “no se es un artista completo hasta que se comunica lo que se está haciendo y de alguna forma se puede compartir el arte”.
Es un reto cumplido, el poder regresar a mi país y mostrar mi trabajo, sin embargo, los retos continúan.
Usted no tenía en mente pasar esta cuarentena, no solo en Ecuador sino en todo el mundo. Al revisar su trabajo usted muestra un largo camino en sus obras, que van desde el encuentro con sus ancestros, la transformación de las imágenes y finalmente la deformación de las imágenes. Lo que le lleva a tener una conclusión de que por más tiempos difíciles que tengamos siempre habrá un nuevo amanecer.
No sabía, esto fue una sorpresa que nos cogió de improviso, no tenía idea de que esto iba a pasar. Cuando se estuvo preparando las obras y textos, al ver que había una casualidad, si veía venir la oscuridad y veía venir este amanecer y vendría tiempo mejores, lo tenía dentro del inconsciente y me agradó mucho saber que de alguna manera ya estaba listo para esto.
No sabía lo de esta pandemia y se cerrarían los eventos, pero en la Casa de la Cultura, se pudo hacerlo virtualmente y fue una satisfacción saber de qué a pesar de estos tiempos difíciles, podemos sacarlos adelante con la ayuda de las personas adecuadas.
Entrevista completa: