SAN RAFAEL.- Una de las nueve comunidades más representativas de producción agrícola y artesanal de la parroquia San Rafael se prepara para la Fiesta de los Grandes Líderes.
Es toda una tradición que comuneros, artesanos, deportistas y artistas indígenas celebren el primer mes del año con Hatun Kuraka Raymi, en donde el Coraza y los Pendoneros deleitaban a la población con su energía, viveza y gozo representando la verdadera esencia de Huaycopungo.
La gran celebración
En teoría Kuraka es el jefe político y administrativo de la comunidad, es decir la máxima autoridad. Este Kuraka es elegido anualmente tomando en cuenta su edad y capacidad de liderazgo a los ayllus (comunidad).
Dentro de las festividades del comienzo del año se festeja el aniversario 76 de la comunidad Huaycopungo que fue fundada el 18 de enero 1945.
En esta celebración del aniversario se realizan diferentes actividades con el objetivo de festejar a los Kuraka y unir a la comunidad, por tantos se realizan eventos deportivos, recreativos turísticos y culturales.
Este año
El campeonato de fútbol de modalidad indígena se tiene previsto desde el 17 al 24 de enero y se realizará en la cancha de la comunidad, donde el campeón se llevará un premio económico de 2.000 dólares, más dos toros, balón y medallas.
Para el vicecampeón hay 1.200 dólares, un toro, balón y medallas. Para el tercer puesto, 700 dólares, un toro, balón y medallas y para el cuarto lugar se premiará con 1 toro, balón y medallas, además de trofeos para los cuatro ganadores como un símbolo de su esfuerzo, dedicación y entrega.
En el ámbito cultural se realizarán eventos con artistas locales, ya que por el momento la organización no concreta artistas nacionales e internacionales.
De esta forma se busca reforzar la cultura, identidad y unión de la comuna indígena.
Vivencia Intercultural
Conservar y fortalecer estas costumbres asume una tarea de gran relevancia para la organización de Hatun Kuraka Huaycopungo 2021, ya que su propósito principal es fortalecer la comuna y potenciar su desarrollo siempre a raíz de perservar la cultura e identidad indígena.
Además, se propone generar una retroalimentación entre las diferentes comunidades de la parroquia, y así, nutrirse del bagaje y el acerbo cultural identitario que la comunidad busca expresar en cada baile, canto, partido, oración y paseo por el lago.
