En el Valle de Íntag, al norte de la sierra ecuatoriana existen 72 comunidades asentadas sobre concesiones mineras, frente a esta explotación, la Coordinadora Ecuatoriana de Organizaciones Sociales para la Defensa de la Naturaleza y el Medio Ambiente planten un proyecto de protección.
Natalia Greem en representación de estas organizaciones participó en el programa informativo Zona Cultura para defender la propuesta de convertir a este valle en un “Santuario Natural”.
Íntag, región de clima tropical permite a sus 17 000 habitantes cultivar toda clase de cítricos, verduras, granos y hasta cacao fino de aroma. Pero su riqueza también está en el subsuelo.
Según el Municipio de Cotacachi, de las 152 263 hectáreas de Íntag, 61 836 han sido concesionadas para minería metálica y otras 28 276 están en trámite, lo que representa el 59,2% del territorio.
El primer proyecto a gran escala en la zona, es Llurimagua, un depósito de cobre, actualmente en fase de exploración avanzada, con una superficie de 4 829 hectáreas, impulsado por Emsaec, filial de la chilena Codelco que tiene otros títulos mineros en la zona por 6 780 hectáreas adicionales.
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