Roberto Simba Quiroz, destacado periodista, caricaturista y pintor fallecido hace unas semanas, cumplió con la gran misión de entregar a sus amigos, familiares y profesión lo mejor de sus dotes artísticos, dejando una huella imborrable en el tiempo, por su gran calidad humana para con todos los que lo conocieron. Motivo por el cual, su hijo Erick Simba le ha ofrecido un homenaje para recordar su memoria, con una Exposición de “Arte de Rosim”, que tendrá lugar de jueves 15 al domingo 18 de abril, de 12h00 a 16h00, en la CASA ANANÁ, ubicada en las calles García Moreno y Oriente, Contacto al Teléfono 09847571434.
En la exposición de Roberto David Simba Quiroz se exhibirán alrededor de 30 cuadros en las técnicas: acuarelas, óleos, acrílico, sobre madera, sobre papel y sobre lienzo. La temática el paisajismo, arte abstracto y religioso.
Su pasión por la pintura le permitió recorrer por todo el país, convirtiéndose en aventurero. Su don lo plasmó en óleos, acuarelas, carboncillo, infinidad de retratos perfeccionándose en la caricatura.
Roberto David Simba Quiroz nació un Octubre del 59, y al igual que muchos talentosos artistas vivió en un hogar sólido. Desde niño apareció su habilidad para la pintura, el periodismo, y perfeccionó en el Colegio de Artes Plásticas de la Universidad Central del Ecuador, continuando sus estudios superiores en la Escuela de Ciencias de la Información.
En el campo periodístico laboró en medios de comunicación como: Diario el Mercurio, Radio el Tiempo, Radio Positiva, Radio Marañón, Radio Sensación. Sus producciones más destacadas en los programas: Enfoque Mundial, Mundo de Recuerdos, Talentos en el Aire, Enfoque Informativo, entre otros, y en televisión en Canal 13.
Realizó innumerables entrevistas a personajes de la política y deporte. Estuvo en muchos eventos sociales donde cubrió el famoso concurso de Miss Universo .De personalidad, alegre, graciosos, frontal, e infinitamente generoso. Le caracterizaba un corazón lleno de amor y listo para compartir lo que tenía para ayudar. Y como indica su hijo Erik Simba “La vida nos dio un ser extraordinario, un padre protector y amoroso, quién siempre me cuidó, pero hoy Dios lo llamo a pintar el paraíso.
¡PAZ EN SU TUMBA!.
